domingo, 24 de abril de 2016

Respuesta al poema "Carta a Usted" de Jose Angel Buesa


Todos hemos vibrado alguna vez bajo el influjo apasionado de los versos de amor de José Angel Buesa.
El inmortal cubano es uno de los grandes exponentes de la poesía romántica y sus versos  nos han sacado de apuro, muchas veces, a la hora de cortejar a una joven.
Hace años soñaba con ser un poeta romántico, mas la cruda realidad se impone y mi falta de habilidad a la hora de rimar, unido a lo difícil de lograr puros versos endecasílabos me disuadieron de la escritura y me condujeron de la mano a mundo de la ciencia.
Sin embargo, hace unos días mi hijo me lanzó el reto de responder al poema  “Carta a Usted” (poema al que en su momento respondieron magistralmente Ernesto Montaner, Arturo Liendo, Enrique Núñez Rodríguez y algunos otros notables) y ni corto ni perezoso lo acepté.
Traté de responder en un tono “nada moderno”, como si fuera la dama agraviada. Uf, fue más difícil de los que imaginé o recordaba y salió sin dudas la peor respuesta jamás dada a Buesa.
Fue, sin embargo, retomar por un segundo mis sueños de poeta, aquellos sueños que dejé guardados en la mesita de noche y que por suerte para ustedes permanecieron empolvados en el olvido.
No queda más remedio. Ahí les va mi respuesta:

Señor, si es que puedo llamar Señor, al
infame e indolente que me colma de dolor.
Decirle quiero, con orgullo, que mi lecho es solo mío,
en él guardo mis lágrimas, si lloro; mis risas, cuando río.

Los momentos, ya pasados, que allí juntos hemos vivido,
no yacen ni en mis recuerdos, se han perdido en el olvido.
Que juré ser suya dice; lo confieso y me arrepiento.
Un cobarde de su talla no es digno de un juramento.
No me compare con flores, ni es usted un jardinero,
Si de comparar se trata: más parece carnicero.
Con su cuchillo afilado va cortando corazones,
Y la mente va dejando colmada de sinrazones.
Si alguna vez lo he besado, quiero quemar ese beso,
en la hoguera de mi ira, en el fervor de mis rezos.
¿No recuerda usted acaso, cuando al mirarme pasar,
lanzó fieras maldiciones, imposibles de nombrar?
Olvide que yo he existido y conténgase su enojo.
Sembré amor en otro campo, y ahora amores recojo. 

3 comentarios:

  1. Pues te quedó bastante bueno,a pesar de lo difícil de lograr puros versos endecasílabos, un abrazo.

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  2. Quedó bastante bien tu poema. Solo algunos defectillos que se pueden mejorar

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